Cumple el amigo Antonio Mayans ochenta primaveras. Y no hay quien se lo crea. Porque está joven en cuerpo y espíritu. El que fuese actor destacado de la mega factoría Bronston e intérprete fetiche de Jesús Franco, sigue más activo que nunca, siempre dispuesto a rodar cine o hacer teatro, algo que, pienso, es su motor vital. Continuar leyendo «Antonio Mayans. Imprescindible»